Por: Kurt Castro
El pasado 24 de noviembre Cultura Profética se presentó en el Movistar Arena, en el marco de sus 20 años de aniversario. En SurfBeats Radio aprovechamos de conversar con los músicas que el próximo 11 de febrero se presentarán en el SurfBeats Festival, en el Estadio Municipal de Pichilemu.
Ustedes ya llevan 20 años de trayectoria, siempre como banda independiente, ¿qué ha sido lo más beneficioso para ustedes de ese trabajo y también lo más complejo?
Willy: “Yo diría que lo que hemos querido evadir de las disqueras es el control. Obviamente si tuviéramos el poder que ellos tienen de meterse en todos lados, de hacer que la música llegue, sería súper bueno para nosotros también. Creo que sería música buena teniendo ese poder. Lo que comúnmente pasa con ese poder es que es música que no aporta mucho. No creo que tenga nada de malo en tener ese apoyo, pero obviamente para tener eso tienes que venderle el alma a la disquera. Eso muchas veces incluye que haga dinero hasta de tus bostezos y eso es lo que nunca hemos querido ceder, ni el espacio creativo, que vengan a imponernos cosas y que nos digan: Esto sí, esto no. Siempre hemos defendido la cuestión creativa.
Si hablamos del trabajo de manera independiente creo que nos ha ayudado muchísimo el hecho de que la música llegó poco a poco, pero a quien le llegó, la abrazó. Y llegó de manera bien casual. De la gente que comparte.
Más orgánica…
Willy: “Exactamente, ese mismo término usamos, que llegue de manera orgánica. Creo que es más efectivo, dura más. También tuvimos la dicha en que empezó Napster y hemos visto todo ese despertar de las redes sociales que nos ha ayudado bastante”.
Las plataformas han ayudado bastante a las bandas independientes. Ahora es más fácil que una banda independiente se dé a conocer que hace 20 años atrás.
Willy: “Totalmente, y nosotros hemos podido aprovecharlo y cada vez aprender más porque antes estábamos un poco lento en eso de dominar estos medios. Y es algo que tenemos que aprovechar a nuestro favor porque seguimos siendo independiente y esto nos permite trabajar de la mejor forma posible”.
¿Qué ha sido lo más complejo para ustedes de ser independientes?
Eliut: “Claro, siguiendo lo que decía Willy, que desde los contactos hasta el mismo poder que tienen las disqueras de hacer que suene tu música llegue a lugares que tu jamás te has imaginado: Hacen cuatro movimientos y pues, ya está ahí. Para nosotros ha sido un poco más cuesta arriba, ha sido una carrera de resistencia más que nada y hemos ido entrando poco a poco, verdad. Yo creo que la radio se ha visto casi hasta obligada de asomarnos porque llegamos a un lugar donde estamos sonando y llenamos un espacio de 10 a 15 mil personas y las radios dicen: ¿Y estos tipos? ¿Qué pasa si no estamos poniendo ninguna canción de ellos? Y por ejemplo, en las redes sociales, subimos un video y tiene 30 millones de visitas. Nos hemos ido conectando con gente clave importante en cada país que visitamos, productores que se encargan de llevar nuestra música para promocionar el evento y eso también ha sido importante en el crecimiento de nosotros”.
Willy: “Lo que ha sido difícil más bien es ser reconocidos en la industria. La gente nos reconoce, pero la industria no quiere aceptar que nosotros estamos ahí. Entonces, por ejemplo no nos vas a ver en unos Grammys, en ese tipo de talent show de gente grande. Es porque no pertenecemos a la manera en que trabaja la industria y a los poderes que existen ya establecidos en la industria. En eso ha sido lo más difícil. Como llegar a Viña por ejemplo. Costó trabajo que la gente se convenciera de creer en este proyecto y quisieran invitarnos, y tuvimos que probarnos de cierta manera y llenar los dos Movistar Arena”.
Con respecto al impacto que han tenido en Chile en los últimos años, ha sido bastante fuerte, sobre todo con la entrega de la gaviota de plata y de oro en el Festival de Viña 2015…
Willy: “Claro, pues, nosotros sabemos y afirmamos que Chile es el país donde hemos tenido mayor crecimiento de este proyecto en muy poco tiempo. Obviamente no creemos que esto pasó solo, verdad, lo fuimos trabajando.
Vimos que la gente ya estaba y que en eso Gondwana tuvo mucho que ver por abrir esas puertas y que este país consuma y busque el reggae en general. Pero creo que lo que nos hizo crecer más también es el hecho de que nosotros quisimos buscar conciertos en diferentes lugares, no específicamente a donde la gente acostumbra a ver reggae, con tal de ampliar el espectro de nuestros espectadores. Creo que eso nos funcionó muy bien en este país. Hizo que fuera más masivo este proyecto. Nosotros amamos y nos gusta el reggae, pero nosotros hacemos música, no creemos tanto en géneros y eso se siente en la música que hacemos. Creemos que tampoco el público debe ser limitado y al trabajarlo de esa manera ha funcionado muy bien aquí y en otros países. Viña lo tomamos como nuestra graduación. Llegamos ahí y fue un punto importante en nuestra carrera y de ahí se nos ve diferente. Como que existe más respeto. Muchas personas se dieron cuenta, por vernos en Viña, que nuestro proyecto está en ese punto, está bien grande. En Puerto Rico nos habían hecho innumerables entrevistas en lo que sea, pero nunca habíamos tenido una portada en un periódico hasta que hicimos Viña. Entonces ese tipo de cosas nos ayudó. No se puede negar que de Viña en adelante ha sido otra cosa”.